Gente que muere al tratar de tomar la selfie perfecta se ha convertido en un fenómeno tan común, que ahora los investigadores buscan maneras para evitar que aumenten las estadísticas de estas tragedias.
Sip, la necesidad humana de obtener la cara de pato perfecta mientras se está parado precariamente en la cima de un risco ha aumentado tanto, que tan solo en los primeros ocho meses de el año 2016 se presentaron 73 muertes confirmadas, ocurridas al tratar de tomar la selfie perfecta, y es una tendencia al alza desde que se tiene estadística, el año 2011.
Un estudiante de doctorado de la Universidad Carnegie Mellon, en Pittsburgh, llamado Hemank Lamba trabaja en un app que prevenga a las personas cuando se encuentran en peligro al tomar una foto.
Su estadística encontró que la manera más común en que estos accidentes mortales ocurren, es al caer de grandes alturas, mientras se posa para una foto desde la cima de un risco, o desde las alturas de rascacielos.
Otros accidentes están relacionados con el agua en ríos o mares, o una combinación de agua y altura, que se presenta sobre todo al saltar al agua desde las alturas.
Las muertes mientras selfie, en Estados Unidos y Rusia, tienen mucho que ver con armas, sobre todo al posar con éstas. En la India, donde se presenta la mayoría de las muertes, los accidentes se suscitan cerca de las vías de los trenes.
El Doctor Lamba trata de desarrollar una app que sirva como “advertencia mientras selfie”, que incluirá datos donde la gente ha resultado lastimada al tratar de tomar fotos. Además desarrolla un algoritmo que pueda analizar fotografías publicados en redes sociales para calcular los riesgos, y advertir en futuros intentos.
Se cree que el lado oscuro de este app es que podría servir para que los amanes del peligro busquen obtener las selfies consideradas las de más alto riesgo, y desate una nueva epidemia de accidentes por imprudencia.
Es cuestión de probar, dicen los expertos. Pero también recomiendan que la mejor prevención de un accidente, es utilizar el sentido común.