Un hombre que manufactura muñecas en forma de niños para ser usadas por pederastas, declaró que se considera a si mismo un artista, cuando el cargamento fue detenido en la aduana de Australia.
Además dijo que está ayudando a que la gente con estas pervertidas tendencias pueda satisfacer sus impulsos de una manera “ética y legal”, porque cree que no vale la pena vivir si se tiene que ir por la vida con deseos reprimidos.
Un representante de la aduana australiana dijo que por ley, los bienes embargados podran ser conservados mientras se realiza una investigación, o destruidos inmediatamente si se considera que su permanencia representa un peligro para la sociedad.
La pena por importar bienes con fines cuestionables puede ser de hasta $450,000 dolares australianos, diez años de cárcel, o ambos.
El fabricante lamenta la destrucción de sus perturbadoras creaciones, ya que cree que habrían ayudado a que los pedófilos aliviaran sus “urgencias”. La policía investiga tanto al fabricante como a los posibles consumidores finales, para verificar que no exista historial de daño a menores.
Este tipo de muñecos está prohibido en la mayor parte del mundo, porque se considera que alienta a las perversiones y alimenta la ilusión de realizar actos indebidos con menores de edad. Pero por otra parte, algunos argumentan que detiene a los pederastas en actuar sus impulsos en niños de verdad. ¿Qué opina usted?
